
El Pasillo de los Tornados de Sudamérica (en portugués: Corredor dos Tornados) es una extensa área en el sureste de América del Sur, caracterizada por la frecuente ocurrencia de tornados y tormentas severas. Las condiciones climatológicas de la región (la confluencia del aire cálido y húmedo proveniente del Amazonas y el Océano Atlántico, el aire frío de la Patagonia y la Antártida, y el aire seco descendente de la Cordillera de los Andes) crean un entorno propicio para el desarrollo de intensas tormentas que se acompañan de granizo de gran tamaño, vientos que superan los 90 km/h y, a menudo, tornados.

En 2006, se publicó un estudio titulado “Where are the Most Intense Thunderstorms on Earth?”, realizado por E. J. Zipser, Daniel J. Cecil, Chuntao Liu, Stephen W. Nesbitt y David P. Yorty, que empleó datos del satélite Tropical Rainfall Measuring Mission (TRMM). Este satélite, lanzado en 1997 con el objetivo principal de medir la precipitación, proporcionó información sin precedentes sobre la distribución global de tormentas convectivas intensas. Los resultados del estudio revelaron que, al este de la Cordillera de los Andes en Argentina, se concentran algunas de las tormentas más intensas del planeta. En esta zona, confluyen corrientes de aire muy distintas: los fríos vientos de la Patagonia y la Antártida, el aire cálido y húmedo originario de Brasil, Paraguay y el norte argentino, y el aire seco que baja desde la Cordillera de los Andes. La interacción de estas masas de aire genera una inestabilidad atmosférica que propicia el desarrollo de tormentas severas, de características similares a las que se observan al este de las Montañas Rocosas en Estados Unidos.
A pesar de esto, la falta de registros exhaustivos y estudios detallados ha dificultado precisar la cantidad real de tornados que ocurren en la región. La limitada cobertura de radares y la baja densidad de población en muchas áreas afectadas dificultan la detección y el registro preciso de tornados, por lo que la cantidad real de estos eventos podría ser significativamente mayor a la reportada.
El nombre Pasillo de los Tornados fue acuñado por la Red de Estaciones de Climatología Urbana de São Leopoldo (Brasil), en reconocimiento a la alta incidencia y relevancia de estos fenómenos meteorológicos en la región.
En el sudeste de Sudamérica –principalmente en Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay– se han registrado numerosos tornados y tormentas severas. No obstante, la falta de registros exhaustivos y el limitado estudio sistemático por parte de los servicios meteorológicos locales han dificultado la determinación precisa de las zonas afectadas, así como de la frecuencia e intensidad reales de estos fenómenos.
Los registros históricos sugieren que las áreas más propensas a tornados se concentran en el centro de Argentina y el sur de Brasil. Sin embargo, esta percepción se ve influida por la mayor densidad poblacional de dichas regiones, lo que facilita la recolección y documentación de los eventos. Esto no implica necesariamente que estos sectores presenten una mayor frecuencia o intensidad real de tornados, sino que evidencia un sesgo en la distribución de la información disponible.

Gracias a estudios sobre tornados a nivel mundial, se ha logrado comprender mejor la ubicación de la región tornádica de Sudamérica. A través de análisis climáticos y meteorológicos, se han identificado áreas con condiciones propicias para la formación de estos fenómenos, lo que ha permitido señalar una posible “zona roja” de tornados en la región. No obstante, la falta de registros oficiales y bases de datos detalladas sobre tornados en Sudamérica dificulta la delimitación precisa del llamado “Pasillo de los Tornados”. Sin un historial de eventos bien documentado, aún no es posible determinar con exactitud el área que abarca esta región de alta actividad tornádica.
Argentina
- Provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, San Luis, Entre Ríos, Santiago del Estero, Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones.
- Norte de La Pampa y de Río Negro.
- Este de Mendoza, San Juan, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Salta y Jujuy.
- Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Bolivia: zona chaqueña de Santa Cruz de la Sierra.
Brasil
- Estados de Río Grande del Sur, Santa Catarina, Paraná y São Paulo.
- Sur de Mato Grosso del Sur.
Paraguay: todo el país.
Uruguay: todo el país.

Uno de esos lugares (pero no el único) podría ser la provincia de Buenos Aires (especialmente el sur), donde se registran con relativa frecuencia tornados supercelulares muy intensos y oleadas de tornados que, en su mayoría no quedan documentadas. Un ejemplo de esto es el partido de Bragado que, según estudios, registra un tornado cada 1,3 años en un área de aproximadamente 2.230 km². Además, en un lapso de solo dos años ha reportado al menos 11 tornados, lo que refuerza la hipótesis de que podría tratarse de un sector con una actividad tornádica mayor a la oficialmente reconocida, ya sea por registros oficiales o por estudios atmosféricos. Si toda la provincia de Buenos Aires tuviera la misma frecuencia de tornados que el partido de Bragado, la provincia podría tener una frecuencia de 140 tornados al año.
Corredor del granizo de Cuyo
Al este de los Andes en Argentina, entre la Cordillera y las Sierras de Córdoba, se encuentra una región conocida por generar algunas de las tormentas más severas del mundo, incluyendo las más intensas del hemisferio sur en términos de granizo. Este sector, que coincide en parte con el llamado corredor de granizo de Cuyo, abarca no solo las provincias tradicionales de esa región, sino también áreas más amplias, como Córdoba. Aquí, las tormentas de granizo pueden alcanzar niveles extremos, produciendo piedras de hielo de tamaño gigantesco, con diámetros que en algunos casos superan los 15 centímetros.
Los tornados más intensos registrados fueron el tornado de Encarnación (Paraguay), el 20 de septiembre de 1926, donde se formó un tornado F4 o F5 que mató a 300 personas, convirtiéndose así en el tornado más mortífero de la historia registrada de América del Sur; y el tornado de San Justo (provincia de Santa Fe, Argentina), el 10 de enero de 1973 fue el tornado más intenso registrado en el Hemisferio Sur (F5), que además se cobró la vida de 63 personas. La oleada de más de 300 tornados en la provincia de Buenos Aires que afectaron la zona en un lapso aproximado de 24 horas, el 13 y 14 de abril de 1993, con intensidades que llegaban hasta F3, fue la oleada de tornados más grande fuera de los Estados Unidos y una de las más grandes del mundo, también conocida como la Oleada de tornados de Buenos Aires de 1993
Otros tornados violentos registrados fueron el tornado de Arroyo Seco, Santa Fe (F4) el 13 de noviembre de 1891; el Tornado de Morteros, Córdoba (F4) el 28 de octubre de 1978; el tornado de Estación López, Buenos Aires (F4) el 6 de mayo de 1992; y el tornado de San Pedro, Misiones (EF4) el 7 de septiembre de 2009, que, por su enorme trayectoria, también afectó al estado de Santa Catarina, Brasil.
Escrito por: Dell’ Arciprete, Javier