La extinta cultura del trabajo

Se puede notar en el último tiempo que, a través de las generaciones, se ha perdido la cultura del trabajo. ¿A qué se debe esto?

En primer lugar, se puede decir que las prioridades de los jóvenes han cambiado. Se debe entender que, a medida que la historia avanza, las generaciones humanas evolucionan y las nuevas se conforman a partir de los contextos sociopolíticos, económicos y tecnológicos de su época.

A lo largo de la historia, encontramos el surgimiento de variadas generaciones en nuestra sociedad. Según estudios, generalmente se suelen mencionar las que van desde 1946 hasta el 2012, ya  que son las que están más activas en el trabajo.

Este artículo pretende hacer énfasis en diferenciar específicamente las generaciones Y o Millennials (1981-1996) y la Z o Centennials (1997-2012), con respecto al trabajo. Por un lado, la generación Y creció en la era digital y fue testigo de la transición hacia la tecnología moderna mientras que, por el otro, la generación Z ha crecido inmersa en el mundo de Internet y las redes sociales.

A partir de esta diferenciación, es indispensable mencionar que la primera mencionada tiene un espíritu emprendedor, lo que ha llevado a la creación de nuevas formas de trabajo y al  impulso de la innovación en diversas industrias, contrario a la generación Z.

Aquí va la respuesta a la pregunta: las prioridades de los jóvenes en torno al trabajo han cambiado. Ahora, priorizan su salud mental y tiempo libre, (y lo digo como miembro de la generación Z). Se ve que claramente los jóvenes tienen valores relacionados al trabajo muy diferentes a generaciones anteriores.

Una encuesta realizada por la consultora Deloitte, llamada “Encuesta Gen Z y Millenial 2023: Reconociendo el progreso, enfrentando contratiempos”, reconoce que el cambio climático es un factor estresante importante para la generación Z. El 69% de esta generación intenta minimizar su impacto en el medio ambiente. Sin embargo, esto afecta directamente sus elecciones en cuanto a su estilo de vida, debido a que no van a elegir una empresa que haga vista ciega a involucrarse con  iniciativas medioambientales .

Si posicionamos el tema desde una perspectiva tecnológica y su constante evolución, se ve que esta ha transformado completamente el mundo del trabajo. Esta nueva realidad exige que las empresas se mantengan al día con los avances tecnológicos y a nosotros, los jóvenes, se nos hace imposible emprender sin esta, más aún buscar un trabajo en el que no tenga implicancia. Aprovechamos esta tecnología y las plataformas de redes sociales al cien porciento, gracias a que con su ayuda se tiene mayor alcance hacia las masas, participando, por ejemplo, en trabajos ocasionales, como entrega de comida, vendiendo productos o servicios en línea, influenciando en las redes sociales, entre otros. Estos son trabajos que eran impensados 20 años atrás, debidos únicamente a lo mencionado anteriormente: la evolución.

Si nos referimos a la salud mental respecto al tema del trabajo y a la juventud, hay una amplia visión. La generación Y no tiene en cuenta este factor importantísimo que, a lo largo de los años, ha ganado más y más relevancia, dado a la modernidad y a través del concepto de “abrir las

mentes”, y que hoy en día es inviable no contemplarlo. Todos los trabajadores tienen derecho a un entorno laboral seguro y sano, pero esto antes no era un requisito que las personas consideraban a la hora de trabajar. Obviamente depende de la realidad de cada persona, ya que, dependiendo de la remuneración, hay gente que hace lo que sea. La Organización Mundial de Salud tiene el lema de que, para proteger y promover la salud mental en el trabajo, hay que fortalecer las competencias encaminadas a que se reconozcan los problemas de salud mental en el entorno laboral y a que se tomen medidas al respecto, especialmente por parte de las personas responsables de supervisar a otras, como los administradores. Esto es otra de las tantas cosas que los jóvenes tienen en cuenta a la hora de buscar un trabajo.

Al igual que las preocupaciones sobre la salud mental, el acoso es un tema especialmente frecuente y preocupante para la Generación Z. Según la encuesta de Deloitte, muchos miembros de esta generación enfrentan altos niveles de conductas inapropiadas en el trabajo, que van desde microagresiones hasta acoso. Los Millennials también experimentan estos comportamientos, aunque en menor medida. Aunque la mayoría de los casos de acoso y microagresiones ocurren en persona en el entorno laboral, cerca de una cuarta parte de ambas generaciones informa que estos comportamientos también suceden mientras trabajan de forma remota.

Hay infinidades de ejemplos sobre qué criterios los jóvenes de hoy en día tienen en cuenta a la hora de buscar trabajo. Los anteriormente mencionados fueron solo algunos.

Partiendo de todo lo explicado en este artículo, el mensaje que se busca dar es que sí, la cultura del trabajo ha cambiado radicalmente, debido a que los espacios de trabajo están experimentando una profunda transformación, impulsada por la convivencia de múltiples generaciones en la fuerza laboral. Cada generación aporta una perspectiva única, así como diversos valores y hábitos laborales, lo que hace imperativo analizar y aprovechar esta diversidad. Al reconocer las fortalezas y áreas de mejora de cada generación, podemos colaborar eficazmente para lograr el éxito colectivo.

Escrito por: Marquez Paloma