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CIENCIA

La aviación y China: una historia más en el avance tecnológico del país de oriente

China no para de crecer en el ambiente científico y sus desarrollos tecnológicos sorprenden al resto del mundo, ahora, en el área de la aerodinámica.

El país de oriente presentó un motor que alcanza para propulsar a un avión hipersónico a una velocidad de 9 veces la velocidad del sonido, ¡casi 3.100 metros por segundo!, o también, un poco más de 11.100 kilómetros por hora.

Lo sorprendente de este desarrollo no es tanto por la velocidad alcanzada -la cual es superada por algunos aviones hipersónicos remotos desarrollados por EEUU-, sino más por el combustible empleado y el tipo de motor.

Por un lado, este motor utiliza queroseno de aviación, algo que se sale del convencional hidrógeno utilizado en la mayoría de aviones hipersónicos. Por otro, el motor es de detonación; un motor que se basa en una salida en forma de anillo la cual despide el combustible en forma de explosiones constantes, lo que resulta en una alta aceleración.

La utilización del queroseno de aviación significó un gran problema para los técnicos del proyecto, puesto que este combustible arde más lento que el hidrógeno convencional y además necesita una cámara 10 veces más grande. No obstante, los científicos no tardaron en desarrollar una solución: una pequeña protuberancia llamada “bulto” ubicada en la entrada de aire, lo que genera que el aire gire a gran velocidad alrededor de la cámara y el combustible reaccione más rápido.

Los encargados del proyecto aseguran haber probado este motor en un túnel de choque hipersónico, el cual simula las condiciones en el aire –tal como si el motor estuviese funcionando en cielo abierto- y lograron grandes resultados.

En la actualidad, los aviones hipersónicos alcanzan el promedio de potencia Mach 2, -2 veces la velocidad del sonido-. Por lo tanto, que este motor sea exitoso con una potencia Mach 9 es destacable.

Algunos expertos expresan que nos encontramos en una “pequeña carrera espacial” de la aviación, puesto por el desarrollo y la “competencia” entre las potencias mundiales por desarrollar aviones más eficaces y veloces.

Dejando esto de lado, no hay duda de que China se ha insertado entre los países con mayor desarrollo tecnológico y en el ámbito científico a nivel global, desde cualquiera de las áreas y sub-ramas. El país de oriente ha invertido y apostado al desarrollo científico.

Por: Santiago Dorsch