Una bandera izada a media asta es, por lo menos en Occidente, un símbolo de luto. Y en luto está Estados Unidos debido a la muerte de Jimmy Carter, quien fue el presidente de este país desde 1977 hasta 1981, a sus 100 años. Según el código de banderas del gigante norteamericano, las banderas pueden ondear a media asta por un período de 30 días luego de la muerte de un presidente o expresidente. Fue Joe Biden quien tomó esta decisión, y Donald Trump no podrá evitar que las banderas no flameen en todo su esplendor durante la inauguración de su segundo mandato.
Ahora bien, ¿quién fue Jimmy Carter? Nacido en Plains (Georgia) en 1924, fue el 76º gobernador de dicho Estado durante el período 1971-1975, y el 39º presidente de los Estados Unidos, tras vencer a Gerald Ford. Miembro del Partido Demócrata, uno de los hitos de su administración fue la firma de los Acuerdos de Camp David en 1978, marcando un nuevo inicio en las relaciones entre Egipto e Israel.
En los 70s, cuando las dos crisis del petróleo golpearon al mundo, Carter preparó el terreno para una reactivación económica y redujo drásticamente la dependencia de Estados Unidos del petróleo extranjero mediante la desregulación de la industria energética junto con las líneas aéreas, los trenes y los camiones. Pero la economía fue justamente uno de los mayores problemas de su gobierno. La inflación (a veces de dos dígitos) y las tasas de interés rozaron máximos históricos, y los esfuerzos por reducirlos provocaron una recesión. Sin embargo, para el final de su administración, se habían sumado cerca de ocho millones de puestos de trabajo y el déficit presupuestario había caído.
La crisis de rehenes estadounidenses en Irán fue uno de los episodios más trágicos de su gestión. El 4 de noviembre de 1979, tras la revolución islámica en Irán, la embajada norteamericana en Teherán fue asaltada por un grupo de militantes iraníes, el cual tomó a 52 estadounidenses como rehenes durante 444 días. Carter intentó un rescate con helicópteros, pero este fracasó trágicamente con la muerte de 8 soldados de élite. Los rehenes finalmente fueron liberados el 20 de enero de 1981, el día de la toma de posesión de Ronald Reagan. Lo que se destaca de Carter en esta situación es que se resistió a las presiones de las Fuerzas Armadas, las cuales buscaban bombardear Irán.
Esta crisis, sumada al mal manejo de la economía, fueron los factores claves que le hicieron perder la reelección en las elecciones de 1980.
Por otro lado, la relación de Estados Unidos con América Latina mejoró notablemente durante su mandato. En este, se recortó la ayuda a los regímenes militares de la región y se supeditó el financiamiento a avances en derechos humanos, lo cual fue importante para que las dictaduras disminuyeran sus abusos y comenzarán a debilitarse. Así mismo, durante su campaña presidencial criticó al expresidente Richard Nixon por contribuir al derrocamiento del presidente socialista chileno, Salvador Allende, y ayudar a establecer una dictadura militar en ese país.
Otro aspecto del avance en esta relación fue la firma del Tratado del Canal de Panamá, cuyo proyecto fue intensamente debatido en el Congreso. Estados Unidos había tenido históricamente el control del canal más la zona que lo enmarca, siendo considerado como territorio estadounidense dentro de un país soberano.
Esta era una de las fuentes más profundas de irritación de la región contra Washington, y había temores de que los panameños, cada vez más resentidos con los estadounidenses, pudieran desencadenar un enfrentamiento cerrando el canal, lo que habría tenido consecuencias catastróficas en términos económicos y estratégicos. Este tratado, firmado en 1977, estableció que Estados Unidos le devolvería la estratégica vía entre los océanos Pacífico y Atlántico a Panamá en 1999.
Luego de terminar su mandato a sus 56 años, volvió a Georgia, donde junto a su esposa Rosalynn fundaron el Centro Carter en 1982. Aprovechando su influencia como expresidente, Carter pasó las décadas siguientes viajando por todo el mundo para supervisar elecciones, promover los derechos humanos y proporcionar asistencia sanitaria y alimentos en países necesitados. Para 2022, el centro había supervisado al menos 113 elecciones en todo el mundo.
Gracias a su prestigio internacional, Carter ayudó a aliviar las tensiones nucleares entre Corea del Norte y Corea del Sur, a evitar una invasión estadounidense en Haití, entre muchas cosas más. Con su histórica visita a Cuba y reunión con Fidel Castro en 2002, se convirtió en el primer presidente en visitar la isla desde 1928, allanando el camino para la normalización de las relaciones entre La Habana y Washington durante el gobierno de Obama. Ese mismo año, recibió el Premio Nobel de la Paz por los esfuerzos del centro para «encontrar soluciones pacíficas a los conflictos internacionales, promover el desarrollo social e impulsar la democracia».
Las banderas se izarán a media asta en memoria de un presidente que consideraba como su mayor logro mantener la paz en su país y no involucrarlo en ninguna guerra. Se izarán a media asta para recordar a una persona, cuyos conocimientos geopolíticos y gran voluntad lo ayudaron a llevar la paz a distintas regiones del mundo.
Escrito por: Cáceres, Matías