La victoria frente a Países Bajos por los cuartos de final del Mundial generó una gran cantidad de polémicas, no solo por el juego, sino que también por declaraciones y hechos que se dieron una vez finalizado el encuentro; situaciones que la prensa internacional consideró “antideportivas”.
Recordemos que durante el partido, Messi festejó su gol de penal a lo J.R. Riquelme frente al banco neerlandés, además de haber un sinfín de provocaciones de parte de ambas selecciones y peleas que por suerte no pasaron a mayores, como también declaraciones de Louis Van Gaal, DT de Países Bajos, antes del partido a las que Messi tomó como faltas de respeto.
Cuando terminó el partido, se vio a un 10 argentino muy enojado, respondiéndole al cuerpo técnico neerlandés y diciéndole “que mirás bobo” a un jugador del conjunto europeo que se le quería acercar cuando Lionel estaba dando una nota. A esto se le suma la reacción del “Dibu” Martínez con el seleccionado rival y el festejo de todos los jugadores tras ganar la definición por penales.
Hasta acá parece normal, situaciones que se dan en el fútbol por los roces y cruces verbales que este deporte tiene, pero al parecer esto no es así para el resto del mundo.
Medios importantes de Europa y de países latinoamericanos tomaron los dichos y acciones de Messi como situaciones antideportivas, como también tildaron a la “Scaloneta” como malos ganadores por el festejo final.
Pero la polémica no termina con este partido: al día siguiente jugaron Francia frente a Inglaterra para definir el último pase a semifinales. En este partido, Harry Kane, delantero inglés, falló un penal que podría haberle dado el empate a su selección, a lo que Kylian Mbappé, figura del seleccionado francés, reaccionó riéndose del fallo del jugador inglés.
Al parecer, esto no inquietó ni generó desagrado en estos medios que tildaron al festejo y desahogo argentino como antideportivo. No cayeron sobre Kylian ni lo criticaron por burlarse de la falla de su rival. Entonces, ¿el problema es que somos argentinos? ¿El problema es que somos sudamericanos? No, el problema es que no medimos a todos con la misma vara.
Por: Sebastián Pierani